Las ruinas sublimes II. Lo sublime que encierra la crueldad
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Hace 10 años
6 comentarios:
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No atina Cercas, como acostumbra. Lo de Orwell y Camus como “regalo a la derecha” no sé qué sentido tiene. Por cierto, mucha gente no necesitamos en absoluto de Vargas Llosa para “aprender“ las “expresiones” de Isaiah Berlin; en cambio nos gustaría que cuando el peruano imita a Richard Rorty en sus artículos, le citase, al menos alguna vez.
Un saludo, Vandoorne.
Con respecto al Vargas Llosa crítico de arte, estoy completamente de acuerdo, pero con respecto a su lectura de Arguedas, aunque no la comparta, no creo que se pueda decir que La Utopía Arcaica es un panfleto infame. Aunque no esté de acuerdo con sus conclusiones generales, el análisis en muy agudo en la mayor parte del libro y, como dices, la unanimidad es aburrida, aunque esto implique un enfrentamiento póstumo con el muy querido Arguedas.
Los enlace los recomendé para seguir minando la unanimidad.
También te mando saludos, Rubén. Siempre es provechoso darse una vuelta por tu blog.
Gracias, Vandoorne, lo mismo digo del tuyo.
A ver, yo tampoco creo que "La utopía arcaica" sea un panfleto infame. Es más, comparto en gran medida la idea central que lo recorre, ya conocida: los bucles melancólicos de Jon Juaristi, las tradiciones inventadas de Hobsbawm, las comunidades imaginadas de Anderson... Ya que no conozco a Arguedas como debería, me pregunto (te pregunto): ¿Vargas Llosa acierta al convertir a Arguedas en el objetivo de su "agudo análisis"? ¿Tenía que ser precisamente Arguedas?
Saludos
No estoy seguro de cómo responder...
Creo que ambos, de formas muy diferentes, son autores que tematizan un desencuentro, un fracaso de la imaginación (en el sentido en el que es la imaginación la que estructura la comunidad), y siendo novelistas, los fracasos de la imaginación les son particularmente difíciles de tragar. Creo que ambos ven ese fracaso desde perspectivas radicalmente opuestas. Pero una oposición es una relación, por ende me parece natural que Vargas Llosa intente adentrarse en la obra del que no piensa como él. El "agudo análisis" del que hablaba está sin duda al servicio de algo que antecede al análisis, y eso es la visión del Perú en particular y de las relaciones de poder en general, que defiende MVLl.
Pobres tontos.
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